Dentro del proceso de formación que se viene realizando con sacerdotes, religiosas y laicos en el tema de atención a víctimas de las violencias, se impartió el cuarto taller esta vez con el énfasis en la visita domiciliar a las personas que han sufrido algún tipo de violencia.

El taller además desarrolló la importancia de fortalecer y cuidar la espiritualidad del agente de pastoral que hace el acompañamiento a las víctimas, así como la importancia de desarrollar la técnica de la escucha empática.

Se contó con la participación de 41 agentes de pastoral venidos de las Diócesis de Chalatenango (Parroquia de Arcatao); Diócesis de San Vicente (Parroquias El Rosario, y la de Santiago Apóstol de Apastepeque); Arquidiócesis de San Salvador (Parroquias San Nicolás Obispo y San José Las Flores de Tonacatepeque; San Luis Gonzaga de Mariona; San Antonio de Padua de Los Planes de Renderos y San Antonio de Padua de Ateos; Parroquia San Sebastián de Cojutepeque y Santo Tomás de la población del mismo nombre; Parroquia Madre de los Pobres de la Chacra y la Parroquia El Calvario de San Salvador). Además, se contó con la presencia de religiosas de la Diócesis de Chalatenango, así como las hermanas Agustinas de San Nicolás, Cojutepeque. Participaron también técnicos de la Vicaría de Promoción Humana del Arzobispado de San Salvador.

La capacitación fue impartida, los primeros días de abril, por el equipo de la Arquidiócesis de Acapulco, México, con el apoyo de Cáritas de El Salvador y Catholic Reliefe Service (CRS)