“Con el mundo dividido nunca vamos a construir la paz, debemos trabajar para superar lo que nos divide, los muros, esta es la verdadera evangelización, tenemos que ayudar a las personas a tener la capacidad para hacer esto”, así expresó la directora del Instituto de Formación Humana Integral de Montreal, Canadá (IFHI), Hermana Marie Marcelle Desmarais, durante su participación en el Taller de Fuerzas vitales realizado a nivel interdiocesano en El Salvador y que fuera organizado por Cáritas de El Salvador. (Ver vídeo)

“El reto es ver al otro como una persona humana y con dignidad no como un enemigo o cucaracha", agregó Marie Marcelle, haciendo referencia a sus experiencias en países en guerra, en dónde la actualización de las fuerzas vitales humanas ha contribuido a la restauración de la persona, le ha permitido ponerse de pie para perdonarse a sí mismo y poder perdonar a otros convirtiéndose así en puente de paz, a eso también se le llama la fuerza de la fidelidad. “Los años de guerra vividos deben trabajarse, porque hay mucho dolor, heridas abiertas que deben ser sanadas para que cicatricen porque si no son tratadas no puede construirse la paz”, agregó la fundadora del instituto de Formación Humana Integral (IFHI) e impulsora de la formación de “Fuerzas Vitales Humanas”.

Marie Marcelle Desmarais considera que desde su experiencia, este proceso de formación, ha permitido a muchísimas personas encontrase así mismas, pudiendo sanar sus heridas provocadas por los traumas causados por situaciones dolorosas, muchas de ellas relacionadas a las violencias que afectan los diferentes países del mundo.

“Las fuerzas vitales ayudan a reconocerse como persona y lo “valiosa que soy”; a la vez me permite ver en otra persona un ser humano. En experiencias traumatizantes las personas necesitan saber lo que hay dentro de sí: “las fuerzas vitales”, estas pueden ser restauradas y actualizadas para ponerlas en función propia, no para dañar, sino para ayudarme y ayudar a otros, no con ideologías. "Cuando esto se logra pueden ponerse juntos a los que piensan diferente”, explico Marie Marcelle Desmarais, quien es religiosa miembro de la congregación Nuestra Señora. “Los seres humanos deben buscar la posibilidad del encuentro, necesitamos personas formadas para reconocer que las fuerzas vitales están en las experiencias vividas”, agregó.

Ella impartió el taller “Profundización de las fuerzas vitales humanas en situaciones traumáticas” a 57 personas llegadas de siete diócesis de la provincia eclesial de El Salvador, entre laicos, sacerdotes, religiosas, personal de Cáritas, estudiantes y profesionales de la psicología. Los objetivos de esta actividad fueron: Fortalecer la dimensión de pastoral de acompañamiento a las víctimas de las violencias; la sanación en situaciones traumáticas y ayudar a poner de pie a las personas; el aprendizaje en las relecturas de experiencias y vivencias; el fortalecimiento institucional, diocesano y parroquial.

La hermana Marie Marcelle, también se reunió con el Arzobispo de San Salvador Monseñor José Luis Escobar Alas Presidente de la Conferencia Episcopal, Monseñor Samuel Bolaños, Monseñor William Iraheta, Presidente y Vicepresidente de Cáritas de El Salvador respectivamente y el Vicario de Promoción Humana de Cáritas de la Arquidiócesis de San Salvador, Pbro. Jesús Octavio Cruz. El objetivo aquí fue animar en la formación humana del clero y religiosas, compartir las experiencias realizadas e invitar a la promoción de un equipo comprometido para la formación en el IFHI en Montreal. Además la religiosa, realizó una jornada con estudiantes y profesionales de Psicología de la Universidad Tecnológica, cuyo objetivo fue sensibilizar a los estudiantes de psicología a cultivar el amor universal en función del servicio a los demás.

Todas las actividades fueron realizadas por iniciativa de Cáritas (en su esfuerzo por fortalecer la pastoral social), con el apoyo de Catholic Reliefe Service (CRS), el Instituto de Formación Humana Integral (IFHI), las hnas. Agustinas de San Nicolás, parroquias y el equipo interdiocesano de pastoral social-caritas y FVH.

Marie Marcelle Desmarais, declaró ser fiel seguidora de San Oscar Arnulfo Romero y manifestó que su venida a El Salvador es una muestra de su amor por este país. Ella cree en lo que se puede hacer por las personas con esta formación,  desde una visión y misión muy humana. “Hay mucho conocimiento académico, pero poca cercanía a las personas y sobre todo a las que más necesitan ser acompañadas, escuchadas y sanadas", comentó finalmente.