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Comunidades preocupadas por sobre explotación de fuentes de agua.
“Empresas están viniendo a querer explotar el agua, quieren abrir pozos para hacer negocios con el agua, estamos preocupados”, explica la Sra. Nelly, quien habita en el Municipio de Moncagua, en el departamento de San Miguel, explicaba durante su participación en un taller sobre el tema del agua organizado por Cáritas en la Diócesis de San Miguel. (Vea vídeo)
“Somos tres comunidades que seriamos afectadas si los pozos son abiertos”, explica esta lideresa refiriéndose a que en la zona donde habita están llegando a instalarse empresas que comercializan el agua. “Estamos muy preocupados por el agua, pues no somos escuchados sobre la privatización del agua y con la gran escasez que hay en la zona de oriente”, agrega esta mujer cuya fuente de agua, de la cual se abastece ella, su familia y otras más podrían verse en un futuro cercano afectadas por la sobre explotación de este invaluable bien. “La escasez podría ser peor, de la que ya tenemos” dice Nelly.
Las declaraciones fueron brindadas en el marco de un taller impartido a líderes y promotores de diversas comunidades que trabajan con Cáritas el tema de la sequía dentro del proyecto de agricultura sostenible. “En los últimos años hemos estado enfocados en dar respuestas de como las familias pueden enfrentar la sequía en la zona que es muy afectada por este fenómeno”, explica el sub director de Cáritas en la Diócesis de San Miguel, Marvin García. “Hoy queremos dar un paso adelante y pasar de las respuestas con tecnología ante la sequía a abordar el tema del agua como un derecho humano. Pues al agua todos tenemos derecho”, agrega García. (Vea vídeo)
“La escasez el agua es un problema serio para la comunidad, pues ya se nos está agotando. Los nacimientos que antes había hoy ya no los tenemos, ahora nos abastecemos un poco de pozos perforados a mucha profundidad, vemos que el agua se va agotando”, comparte preocupado Santos, quien llegó de la zona de Santa Rosa de Lima, en el departamento de La Unión, uno de los más afectados por la sequía en El Salvador.
“El agua no puede ser privatizada porque todo ser humano tiene derecho a este bien que Dios nos ha dado, queremos hacer conciencia a la comunidad de que veamos que el agua no puede ser privatizada. Nosotros somos campesinos y necesitamos agua para producir nuestros propios alimentos”, manifiesta este líder ante la realidad de que en el país el agua no es reconocido en la Constitución de la República como un Derecho Humano y ante la ausencia de Ley General de Aguas que vele porque este recurso sea custodiado por el Estado para el bien de toda la población. “El gobierno tiene que hacer valer la constitución porque ahí dice que los recursos del Estado deben de ser para todos”, finaliza.