Catholic Relief Services (CRS) El Salvador, en alianza con Cáritas de El Salvador, implementarán un Proyecto de apoyo para familias afectadas por la sequía extrema ocurrida en el año 2018 (Vea diagnósico). El Proyecto contará con una inversión de $60 mil dólares, financiados por CRS. Con él, se busca alcanzar a 500 familias en las zonas de Santiago de María y San Miguel a través de dos ejes: la transferencia de efectivo y, capacitaciones que abonen al fortalecimiento de capacidades de los beneficiados. La acción local se ejecutará a través de la labor que realiza Cáritas de El Salvador en las zonas referidas. Esto se dio a conocer en conferencia de prensa realizada en forma conjunta por ambas instituciones. (Ver vídeo)

La intervención complementará los proyectos agrícolas de CRS, dirigidos a mejorar la resilencia de los pequeños productores ante el cambio climático, frente a los efectos de la sequía que, en algunos casos, podrían impulsar la emigración.

Un estudio del PMA , realizado en el 2017, encontró que casi la mitad de los migrantes centroamericanos entrevistados, informaron que tenían inseguridad alimentaria y que el 75% de ellos se había visto obligado a utilizar estrategias de afrontamiento negativas, como la venta de sus tierras. Los migrantes de las zonas más afectadas por la sequía consideraron que la falta de alimentos era la razón principal para emigrar.

El Proyecto beneficiará a familias de pequeños agricultores cuyo único medio de subsistencia es la agricultura y que no cuentan actualmente con apoyo de alguna otra organización. Asimismo, se priorizará a aquellas familias que tengan niños menores de 5 años y/o personas de la tercera edad dentro de su núcleo familiar.

La transferencia de efectivo se realizará a través de la aplicación de una metodología llamada Cash Transfer, por medio de una entidad financiera. Las familias podrán acudir a las instalaciones de dicha financiera y retirar durante los meses de febrero y marzo $50 dólares, cada mes.

Las capacitaciones que se ofrecerán abordan tres grandes temas: economía local; alimentos alternativos, gestión de riesgos, género y protección. Asimismo, busca impulsar la creación y rehabilitación de activos a nivel comunitario y familiar, que permita a las familias prepararse para enfrentar crisis recurrentes como la sequía.

El proyecto fue diseñado con base a un diagnóstico realizado el 2018 por CRS y Cáritas, a raíz de la alerta roja que fue decretada en julio del mismo año por La Dirección General de Protección Civil. En una primera intervención, CRS otorgó de sus fondos propios $40 mil dólares para beneficiar a 400 familias afectadas con kits de alimentos en granos básicos que contenían arroz, frijoles, maíz, azúcar y aceite. Con la finalidad de dinamizar la economía local, los granos básicos se compraron a pequeños productores de la zona. El costo de cada kit rondó los $70 aproximadamente.

Cáritas de El Salvador ha venido atendiendo en los últimos años a familias de la zona oriental afectadas por la sequía recurrente. El apoyo se ha dado, además de víveres, con formaciones encaminadas a aumentar la resiliencia de estas personas ante los efectos del cambio climático en general y en particular los de la sequía.