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Hay luz y esperanza para las víctimas de las violencias.
Unas 40 cuarenta personas, entre sacerdotes y agentes de pastoral de 12 parroquias, el equipo interdiocesano de pastoral social y algunos miembros de las Cáritas diocesanas, recibieron un taller que les brinda herramientas de sanación personal, memoria histórica y Metodología para mejorar el acompañamiento a víctimas de los distintos tipos de violencias, que se viven en el país. (Ver vídeo)
“Si en el país hay violencia nos afecta a todos, directa o indirectamente, por eso todos necesitamos sanarnos interiormente a nivel espiritual, psicológico y humano. Eso nos permitirá atender mejor a las víctimas de las violencias”, explicó el sacerdote Mauricio Ernesto Aguirre, párroco de la parroquia San Antonio de Padua, en Ateos.
Han sido dos jornadas las que han sido impartidas a los participantes del Taller de Atención a Víctimas de las Violencias. “El taller es vivencial” dice Aguirre y “tenemos que reproducirlo en nuestras parroquias para llegar a crear la pastoral de acompañamiento a víctimas de las violencias”, añade el sacerdote. Por su parte Hilda Margarita de Celso, una de las agentes de pastoral que participó, considera que para los miembros de la parroquia a la que pertenece esta formación es una gran herramienta porque podrán llevar consuelo de mejor forma a tantas madres que han perdido a sus hijos, "es una sociedad que está gritando auxilio... y esta es una siembra que tiene que dar sus frutos... tenemos que dar un paso a la reconciliación", considera Celso. (Ver vídeo)
La formación fue desarrollada por Caritas de El Salvador en el marco de la cooperación fraterna y facilitado por equipo de Cáritas en la Diócesis de Acapulco México, en dónde la referida pastoral ha venido ejecutándose exitosamente, en quince parroquias durante seis años.
“Son muchas las personas, familias enteras, que se han visto afectadas por las violencias en el país, y lastimosamente no ha habido un proceso por el cual puedan ir sanando sus heridas y traumas”, comparte el agente de pastoral juvenil de la parroquia San Luis Gonzaga de Apopa, Dennis Bautista. (Ver vídeo) Él explica que, aunque ya han venido acompañando en su parroquia a víctimas de las violencias dada la necesidad, no contaban con una formación idónea para este fin. “Yo he venido sufriendo en carne propia estas heridas, el dolor humano, traumas y temor, en ver a muchos jóvenes de mi parroquia llenos de vida y esperanza, desaparecidos, presos o morir sin ningún sentido”. El taller impartido viene a dar luz y esperanza de que sí es posible salir adelante, es decir sanar, para ayudar a sanar a otros y estas personas, familias y comunidades recuperen el sentido de la vida, su identidad y futuro”, comenta este joven que vive en una de las zonas de El Salvador con alto índice de violencia delincuencial. Dennis nos comparte que el participar en este taller ha sido importante. “El aprender procesos que nos permitan ayudarle a estas personas (víctimas de las violencias), a poder salir de la situación de dolor y desesperanza en la que están”, es valioso considera este líder de pastoral juvenil.
El taller ha sido desarrollado en el marco de la pastoral social-Cáritas, que animan seis caritas diocesanas y oficina nacional con el apoyo de CRS y SELAC. Hasta el momento se han impartido dos jornadas, la primera fue desarrollada en el mes de abril, la segunda en agosto y falta una tercera que será en Noviembr e de 2018.
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